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AGNI: Cuida tu sistema inmune
con Ayurveda & Yoga

Inmunity Box

AGNI es un término de máxima importancia en la tradición védica. Tanto es así, que es la primera palabra del 1º Veda (Rigveda 1.1.1)

agním īe puróhitayajñásya devám r̥tvíjam | hótāra ratnadhā́tamam ||

En este verso se invoca a Agni como el guía del Yajña, el único capaz de invocar al resto de devas a unirse y aportar prosperidad.
En una versión más mundana es que agni, nuestro fuego interno, es el núcleo de todos nuestro sistemas y tejidos, y de él depende nuestro bienestar y armonía.

Existen varios subtipos de agni, en nuestros tejidos corporales y en nuestra mente, y agni es también quien aporta la claridad luminosa de nuestro intelecto.
En este artículo comentaremos más detalladamente acerca de jâtharâgni, el fuego digestivo, la pieza clave para nuestra inmunidad.

Hoy día está muy en boga el término “inmunidad” y el uso de productos naturales que aumenten nuestro sistema inmune. Pero eso queda corto para Ayurveda, que siempre va más allá. Ayurveda es la maravillosa ciencia de la prevención. ¿Por qué tomar complementos externos cuando podemos estimular la inmunidad con nuestros actos cotidianos, desde el interior?

La buena calidad de agni (fuego digestivo) es quien determina un sistema inmune fuerte.

En este artículo te explico algunos tips ayurvédicos para que mantengas un agni saludable y un sistema inmune fuerte, pero primero es necesario que reconozcas cómo es tu agni actualmente.

El estado de tu fuego digestivo puede ser:

Irregular (vishâmagni): tu apetito es muy variable y suele asociarse con hinchazón y dolor abdominal. Relacionado con Vâta dosha.

Bajo/lento (mandâgni): no tienes un gran apetito y tus digestiones tienden a ser lentas y pesadas. Sientes letargo tras las comidas. Asociado a Kapha dosha.

Alto/agudo (tîkshnâgni): tu apetito es muy elevado, tus digestiones muy rápidas y en ocasiones generan ardor o acidez. Relacionado con Pitta dosha.

Equilibrado (samâgni): tienes buen apetito, comes con hambre a las horas establecidas y digieres bien la mayoría de comidas, sintiendo ligereza y energía después de digerir la comida.

Un agni bajo o irregular ocasionará que ciertos alimentos queden sin digerir en forma de toxinas (âma, en âyurveda) y este es el origen de la mayoría de trastornos y una baja inmunidad.
Un agni excesivo también puede destruir nuestros tejidos.

¿Has reconocido cómo es tu agni?

Vamos entonces a ver algunas recomendaciones saludables desde la perspectiva ayurvédica para que mantengas un agni equilibrado y que tu sistema inmune se convierta en un sistema de defensa resistente.

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RUTINAS AYURVÉDICAS (dinacharya)

En un estilo de vida ayurvédico, tenemos muchas herramientas cotidianas para actuar a favor de nuestro agni y una de ellas son nuestras rutinas diarias o dinacharya.

A continuación, te cuento algunos tips ayurvédicos de cómo podemos actuar a favor o en contra de nuestro agni a lo largo del día:

(1) La hora de levantarse es muy importante:

Levantarte antes de la salida del sol te aportará ligereza y eso estimulará un agni y una vitalidad mayor. 
En cambio, levantarse tarde, actúa en contra de nuestro fuego interno, aporta pesadez y lentitud a nuestro metabolismo

(2) Limpia tu lengua con un raspador lingual nada más levantarte: retirar la capa blanca de toxinas que se acumula sobre la lengua por la noche limpia el organismo, lo ‘descarga’ y estimula el agni

(3) Toma un vaso de agua templada en ayunas (con jengibre y/o limón en función de tu constitución y época del año): esto limpia nuestros canales internos y estimula el fuego digestivo

(4) No duermas durante el día y menos después de comer: eso aporta gran pesadez y lentitud a nuestro agni

(5) Da un paseo ligero al aire libre antes de comer (estimula tu agni) o después de las comidas (ayuda a digerir mejor)

(6) Evita un uso excesivo de pantallas: eso desvitaliza tu organismo y disminuye la calidad de tu prana (fuerza vital), el aliento interno que tu agni necesita para arder bien

(7) Evita una vida sedentaria, ejercita tu cuerpo cada día solo hasta que en tu frente aparezcan las primeras gotas de sudor. Un exceso de ejercicio vigorizante también puede desequilibrar tu agni

(8) En general, al organismo y a nuestro agni le gustan los horarios fijos de comidas y sueño, trata de ser regular

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ALIMENTACIÓN AYURVÉDICA (Ahara)

Seguimos ampliando la ‘caja de herramientas’ ayurvédica para aumentar nuestra inmunidad con recomendaciones acerca de nuestra alimentación o ahara.

Una de las claves para la salud en Ayurveda es cómo nos alimentamos y nuestros hábitos alimenticios, que repetimos momento a momento, día tras otro. Estos hábitos que tenemos integrados pueden hacer decantar la balanza de nuestra salud hacia un sistema inmune fuerte o hacia un sistema debilitado e ineficiente frente a los patógenos externos.

A continuación, algunos tips que pueden beneficiar nuestro fuego digestivo, o bien disminuirlo:

(1) Come sólo si tienes apetito: ingerir alimentos sin hambre o sin haber digerido por completo la comida anterior genera pesadez en tu organismo y ralentiza tu fuego digestivo

(2) En general (depende de la persona y la estación) tus alimentos deberían estar cocinados, no crudos, no ser pesados en exceso y tomarlos calientes

(3) Haz la comida principal cerca de mediodía (12h-13h30) ya que la energía externa del sol colaborará en tu digestión aportando mayor fortaleza a tu agni

(4) Los sabores salados, ácidos y picantes ayudan a estimular tu agni. Así, si tu fuego es lento o bajo, favorécelos. Si en cambio es excesivo, redúcelos.

(5) Haz uso de especias que estimulen el agni si lo tienes lento o bajito (jengibre, pimienta, canela, etc) o especias que lo disminuyan si es demasiado potente (hinojo, cilantro, cardamomo, etc)

(6) No bebas en exceso junto a las comidas si tu fuego es lento o irregular ya que acabaría por apagarlo

(7) Mastica bien la comida, hazlo de manera consciente, disfrutando de los sabores, colores y texturas y en un ambiente tranquilo, lejos de pantallas y discusiones

(8) Cena ligero y caliente y asegúrate de haber digerido bien la comida antes de acostarte

 

Como ves, no son pautas complicadas pero nuestros hábitos arraigados pueden ser arduos de modificar. 
Te recomiendo que empieces poco a poco, y que vayas introduciendo los cambios de manera paulatina y gradual, pero de manera segura y definitiva.

Sin darte cuenta, con el tiempo, habrás sustituido tus hábitos antiguos por unos nuevos más saludables. Lo notarás en tu estado físico y mental, y también en un sistema inmune más fuerte que hará que tu salud no se desequilibre ni con tanta frecuencia ni con tanta gravedad.

Pero continuemos con algunas recomendaciones más acerca de introducir una práctica yóguica específica que trabaje a favor de nuestro sistema inmune mientras mantenemos nuestro cuerpo saludable y tonificado y nuestra mente más clara y en paz.

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La actividad diaria debe estar presente en nuestro estilo de vida para sentirnos vitales y sanos, pero esta también debe ser acorde a nuestra constitución y las condiciones externas. 
Una buena manera de ejercitarnos física, mental y emocionalmente, desde la perspectiva ayurvédica, es a través de las diferentes técnicas yóguicas.

Te indico, a continuación, algunas ideas para trabajar a favor de tu fuego interno e inmunidad:

(1) Una buena práctica es empezar el día con un pranayama vigorizante como kapalabhati o bhastrika para limpiar nuestro organismo de buena mañana.

Antes de practicar estas técnicas debes asegurarte de que son adecuadas a tu constitución y época del año y que no suponen una contraindicación para tu estado de salud (consulta con unx profesional)

(2) Sūrya bhedana Prāṇāyāma es otra técnica que te ayuda a estimular el calor interno y un agni mayor, si es lo que tu organismo necesita

(3) La respiración yóguica o completa es adecuada para todxs y equilibra tu fuego digestivo, tanto si este es lento como elevado.

(4) Posturas (asanas) que pueden estimular tu fuego interno son aquellas que movilicen y comprometan la tensión de la zona abdominal (la mayoría) como por ejemplo: vīrabhadrāsana (guerreros), phalakāsana (tabla), pawanmuktasana (gas), Ardha Matsyendrasana (o torsiones en general

(5) Si tu fuego es excesivo, prueba con posturas poco exigentes que extiendan tu abdomen y costados, como por ejemplo: Supta Baddha Konasana, matsyasana o inclinaciones laterales en diferentes posiciones

(6)Savasana, la postura tradicional de relajación siempre debe estar presente para finalizar tu práctica o en pequeños descansos intermedios durante esta. En esta postura se facilita que la energía movilizada, el fuego interno creado, se distribuya de manera adecuada hacia esas zonas que lo requieren

(7) La relajación mental es también necesaria para una digestión eficiente, así que practica técnicas de pratyahara para relajar tus sentidos como, por ejemplo, yoga nidra u otras técnicas de meditación (revisa mi canal de Youtube para algunas prácticas guiadas)

(8) SONRÍE más, es una postura o gesto universal que trabaja directamente sobre la relajación de nuestras emociones. El equilibrio emocional es el caldo de cultivo perfecto para un agni en armonía y un sistema inmune fuerte.

 
Y hasta aquí nuestro recorrido a través de acciones cotidianas que nos permiten mantener un fuego digestivo adecuado para estimular un sistema inmune fuerte.

La salud está en nuestras manos. ¡Te deseo un día a día saludable!

 

Si deseas que trabajemos juntas para ordenar tus rutinas y estimular tu vitalidad e inmunidad, reserva tu consulta personalizada y nos ponemos ¡manos a la obra!

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